Xataka – Andorra se ha instalado en los DDoS: lleva ya tres ataques con el boicot a varios streamers españoles
Cuarto día, tercer hackeo. Andorra empieza a familiarizarse con el concepto DDoS, los ataques distribuidos de denegación de servicio. La operadora de telecomunicaciones del principado acaba de informar a través de Twitter de un nuevo caso de DDoS que está afectando al servicio de parte de sus clientes. La incidencia llega tras otras similares registradas el viernes y el sábado.
“La red de Internet está sufriendo nuevamente un DDoS. Por este motivo, algunos usuarios pueden tener dificultades para navegar por Internet”, detalla Andorra Telecom, que asegura estar trabajando en la incidencia para “mitigarla” lo antes posible. En los anteriores casos la operadora informó de la resolución del problema pasadas varias horas, lo que no evitó que acabase boicoteando la participación de algunos de los streamers más conocidos de habla hispana en un torneo online.
«Perjudicar a algunos youtubers»
El primer ataque se registró el viernes a última hora, hacia las ocho de la tarde, coincidiendo con la celebración de los “Squid Games”, un torneo que arrancó el miércoles pasado con un interesante punto de partida: 147 afrontaban pruebas inspiradas en “El juego del calamar” para hacerse con un premio de 100.000 euros. De repente, y sin que los usuarios supiesen por qué, los streamers que jugaban desde Andorra dejaron de retransmitir en Twitch. Entre quienes estaban en la partida destacan caras tan populares como Auronplay, El Rubius o TheGrefg. Minutos después de las diez, la compañía explicaba en Twitter que “la red de Internet estaba sufriendo un ataque DDoS”. La servicio quedaba «estabilizado» aproximadamente media hora más tarde.
⚠️ La xarxa d’internet està patint NOVAMENT un atac de denegació de servei (DDoS). Per aquest motiu, alguns usuaris podeu tenir dificultats per navegar per internet. Ho estem mitigant.
— Andorra Telecom (@AndorraTelecom) January 24, 2022
Algo similar ocurrió el día siguiente, sábado. Más o menos a la misma hora, sobre las ocho menos cinco de la tarde, la operadora del micro-Estado volvía a informar de un nuevo episodio de DDoS por el que ciertos usuarios podían encontrarse con “dificultades” para navegar. El problema se daba por solucionado poco antes de las diez y media. Ayer a última hora Andorra Telecom detallaba que los ataques “buscaban perjudicar la programación de algunos youtubers” y aseguraba que habían “afectado al servicio de Internet y de 4G de algunos” de sus clientes.
Los episodios de DDoS, efectivamente, tuvieron consecuencias en el desarrollo de los “Squid Games”. El sábado por la tarde la cuenta Voces de Squid Game Minecraft (@LaVozdeTodo) recogía en Twitter la “eliminación por desconexión” de 11 jugadores, como elrubius, SrAuronPlay, SweetyB o Grefunando. “Una puñalada dolía menos”, señalaba Gregf en las redes.
Varis atacs de denegació de servei (DDoS) que buscaven perjudicar la programació d’alguns youtubers, han afectat divendres i i dissabte el servei d’internet i de 4G d’alguns clients d’Andorra Telecom https://t.co/Aag03nA78K
— Andorra Telecom (@AndorraTelecom) January 23, 2022
Los DDoS consisten, básicamente, en sobrecargar los servidores objetivo para saturarlos e impedir su buen funcionamiento. Lo habitual es que se ejecuten a través de distintos puntos de red, desde los que se envían de forma simultánea grandes cantidades de solicitudes. El flujo masivo hace que los recursos del servidor se vuelvan insuficientes y acabe colapsando. Al recibir la avalancha de tráfico, incapaz de asumirla, el servidor deja de responder a más peticiones de acceso.
Andorra lo afronta con una peculiaridad. Andorra Telecom, sociedad pública, es el único proveedor de Internet del principado, un micro-Estado de apenas 77.200 habitantes, donde posee el monopolio de las telecomunicaciones. Su nuevo aviso ha generado crítica de los usuarios en las redes.
–
La noticia
Andorra se ha instalado en los DDoS: lleva ya tres ataques con el boicot a varios streamers españoles
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Carlos Prego
.